Pero lo que es innegable es su delicioso sabor,la originalidad del resultado,y la escasa dificultad en la elaboración de su extraña mezcla,merece la pena,os lo aseguro
INGREDIENTES:
- 8 huevos
- 1 litro de leche tibia
- 250 gr de mantequilla derretida
- 280gr de azúcar
- 225 gr de harina
- La ralladura de un limón
- 2 cucharadas de esencia de vainilla
Para elaborar este pastel, necesitamos que los huevos estén a temperatura ambiente, y que la mantequilla esté derretida pero fria.
Comenzaremos por poner el horno a precalentar 160 grados
Derretimos la mantequilla y la dejamos enfriar totalmente
Separamos las claras de las yemas.
Montamos las claras a punto de nieve fuerte,de forma que al ponerlo boca abajo,no se caiga,reservamos.
Mezclamos el azúcar con las yemas y la vainilla,hasta lograr una crema esponjosa,después añadiremos la mantequilla derretida pero ya fría, la leche tibia,despacio y sin dejar de batir,después añadimos la ralladura de limón, la harina,hasta que se disuelva,y las claras montadas con movimientos envolventes.
Os aclaro que la masa es muy liquida,pero así debe ser.
Forramos un molde rectangular con papel vegetal,para poder desmoldar el pastel con facilidad una vez horneado,verteremos con cuidado la mezcla, y meteremos en el horno durante una hora,después apagaremos pero dejaremos el pastel dentro del horno,para que enfríe lentamente sin bajarse.
Cuando esté frio cortaremos en porciones y espolvorearemos con azúcar glas
El que veis en la foto es de chocolate,y lo lograremos añadiendo 50 gr de chocolate en polvo,que mezclaremos con la harina.
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